martes, 4 de diciembre de 2012

Navidad y el goce del Mercado de alimento en españa y Valencia



Se acerca la Navidad y todos y todos nos pasamos alguna vez por el Mercado Central de Valencia. Lleno de luz y color, perfumes y aromas, con su cúpula central en cerámica resplandeciente que recuerda la importancia de nuestra naranja, presente en nuestro inconsciente colectivo y causa de nuestra un día prosperidad material. 

Los grandes mercados europeos pasan por los populares, como la Boquería de Barcelona o el de San Miguel en Madrid, convertido en centro gourmet.
El Mercado Central de Valencia fue diseñado en estilo modernista allá por 1914 por Francesc Guàrdia y Alexandre Soler formados en el modernismo de Barcelona.
En Paris existen todavía, cubiertos o semicubiertos, dedicados a la alimentación, el Marché Saxe-Breteuil junto a la torre Eiffel, el Marché Bastille junto a la célebre prisión y el Marché les enfants rouges, junto al antiguo hospicio de niños vestidos de uniforme encarnado, el más antiguo, de 1628. Pero el más famoso y citado en la literatura diociochesca son Les Halles, donde se podía obtener desde la fruta y verdura hasta la última moda pasando por muebles de estilo Luis XIV.


 Destruidos, por desgracia, para construir un nuevo barrio residencial, el barrio “Les Halles” y una monumental torre de oficinas que rasga la noche parisina, la Tour Montparnasse.

Otro ejemplo más próximo a nosotros es el de Les Halles de Angouleme, un bello mercado cubierto. Construidas en el siglo XIX, el mercado es un vestigio de la arquitecura industrial de fin de siglo. 

 

Se inspiran en las de Paris ya mencionadas y se elevan en la parte alta de la ciudad, con bella panorámica, sobre el antiguo castillo del duque de Angulema.
Fueron restauradas en 1991 como las de Valencia, símbolo ambas de la alianza y el respeto entre la tradición y la modernidad.

El Mercado Central de Valencia guarda cierto paralelismo con la elegancia del de Les Halles de Angulema, con su crucero central, la bella iluminación, el uso de la cerámica con flores y frutos y las vigas de hierro de orden clásico acabadas en hojas de palmera. Nuestras vigas son de color ébano para insistir en el respeto que el progreso rinde a la tradición.

          El mercado de Nazaret proyectado sobre el Mercado Central de Valencia

Visitemos el Mercado Central estas Navidades, visitémoslo siempre.
JVN